«Alba es una trabajadora incansable, grandísima profesional y una gran persona. Siempre está sonriendo y te transmite la sensación de que todo es sencillo y todo saldrá bien, lo cual luego se cumple con creces»
Contactar con Alba fue la mejor decisión que pudimos tomar para conseguir celebrar la boda de nuestros sueños. De nuestra primera cita salimos convencidos de que Lluvia de Arroz sería nuestra wedding planner.
Alba es una trabajadora incansable, grandísima profesional y una gran persona. Siempre está sonriendo y te transmite la sensación de que todo es sencillo y todo saldrá bien, lo cual luego se cumple con creces.
Durante los diez meses en los que trabajamos mano a mano con ella, Alba nos ayudó en todo momento a darle forma a nuestras ideas y nos planificó la boda perfecta. En nuestro caso concreto la gran mayoría de nuestros invitados venían de fuera y nos ayudó muchísimo a bloquear hoteles para que los invitados pudieran ir reservando (nuestra boda fue en temporada alta en una villa muy turística) y nos dio la idea de hacer para las habitaciones unas preciosas y prácticas cestas de bienvenida.
Nos ayudó a elegir entre todo el abanico de proveedores que existen para todo lo relacionado con el tema boda (fotógrafo, peluquería y maquillaje, vestido, tocado, invitaciones y papelería…) quién podría adaptarse mejor a nosotros y el resultado fue que acabamos rodeados de grandísimos profesionales que hicieron de nuestra boda un día perfecto, maravilloso e inolvidable.
Y el día de la boda, como no podía ser de otra manera, el trabajo de Alba fue impecable. Aunque amenazó lluvia toda la mañana y mediodía, Alba consiguió prepararnos el cocktail al aire libre (yéndose corriendo al acabar la ceremonia pues inicialmente habían aplicado el plan B para lluvia), lo cual era importantísimo para nosotros.
Entre el equipo de Lluvia de Arroz y el maravilloso equipo de nuestro restaurante consiguieron que tuviéramos la boda perfecta. Alba nos marcó los tiempos perfectamente y nos iba avisando para llevar a cabo todo lo que queríamos hacer (regalos, discursos, el baile nupcial…) así que todo fluyó y nosotros lo único de lo que nos tuvimos que preocupar fue de disfrutar del día más feliz de nuestras vidas.
Como le digo a toda persona que me pregunta por la boda, lo mejor que pudimos hacer fue haber tenido a Alba en nuestras vidas.
Disfrutamos del día de la boda desde el mismo momento en que nos despertamos (y por supuesto todos los meses previos), ya que teníamos la seguridad y certeza de que al estar Alba encargada de todo, todo saldría perfecto, y así fue. Yo que tenía miedo de estar muy nerviosa y no poder disfrutar fue al contrario, estaba en mi nube de felicidad disfrutando de cada segundo. Y lo mismo mi hoy ya marido, aunque él es más tranquilo en general que yo.
Todos los invitados nos felicitaron por el trabajo de Alba y destacaron que la boda fue totalmente nosotros. Como me escribió una amiga al día siguiente: «Fue una fiesta estupenda. Se nota el empeño, las ganas y el amor que habéis dedicado para cada detalle. Refleja vuestra personalidad y desbordáis felicidad».
Nunca podremos agradecerle del todo a Lluvia de Arroz que organizara, coordinara, decorara y viviera con nosotros el que sin duda ha sido el día más feliz de nuestras vidas hasta ahora. Hoy y siempre, GRACIAS.
Laura Queiruga y Juanca Rodríguez
Se casaron el 29 de julio de 2017
Foto: Juan Gestal